Para nadie es novedad observar cómo el crecimiento de las ciudades ha sido un factor relevante en los últimos años. La velocidad con que aumenta la urbanización, junto con el crecimiento demográfico, plantea diversos desafíos a una industria como la construcción, donde el uso de materiales, energía, generación de residuos y emisiones de gases de efecto invernadero son aspectos en los que una mirada sostenible se hace necesaria para poder seguir creciendo en el largo plazo.
De ahí que la economía circular esté cobrando fuerza como alternativa.
Una mirada circular en la construcción.
La economía circular es un concepto económico cuyo objetivo es que el valor de los productos, los materiales y los recursos -como el agua y la energía- se mantenga en la economía durante el mayor tiempo posible, y que se reduzca al mínimo la generación de residuos. Está, por tanto, íntimamente ligada a la sostenibilidad, y si bien su aplicación en la industria de la construcción presenta un ambicioso desafío, su implementación ofrece grandes beneficios a corto y largo plazo. Esto es porque la construcción es uno de los sectores más consumidores de recursos y más generadores de residuos, originando desechos como el cemento usado o la chatarra.
Ante esto, la economía circular impulsa a rediseñar las formas en que las comunidades se proveen de infraestructura, diseñan y conservan sus espacios, y se relacionan con el medio ambiente. Promoviendo la renovación y reutilización de bienes, esta estrategia hace pensar en materiales suprareciclados a la hora de construir, trayendo la oportunidad de ahorrar en costos y la capacidad de crear cosas a partir de un flujo de residuos, así como disminuir la incorporación de carbono y reforzar la responsabilidad de la cadena de suministro. Asimismo, los avances de la tecnología de mano de la Inteligencia Artificial, aportan herramientas adicionales para agilizar los procesos. Además, llama a establecer modelos de negocios circulares, diferenciándose en la oferta de activos inmobiliarios y modelos tradicionales de financiamiento.
Materiales de construcción.
Uno de los principios básicos de la economía circular se basa en mantener los productos, componentes y materiales en su máximo valor y uso. Esto hace referencia a dos aspectos claves: la durabilidad y el ciclo de vida útil.
La durabilidad de los materiales de construcción en el ambiente construido abarca la importancia de seleccionar materiales y productos con un rendimiento duradero. No deben degradarse, ni necesitar mantenimiento o sustitución. Si un producto es duradero, consume menos energía y es más rentable para la construcción.
El círculo de la vida útil duradera abarca las opciones de fin de vida de los materiales. Es muy importante elegir materiales que sean fácilmente reciclables si no se reutilizan y, mejor aún, que se reciclen para crear materiales y productos de mayor valor. En cuanto al contenido de los materiales, es importante asegurarse de que los productos seleccionados tengan el mayor contenido reciclado posible para minimizar el uso de recursos primarios.
La Hoja de Ruta en Chile.
El 2019, el Ministerio de Medio Ambiente, junto al Ministerio de Economía, CORFO y la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, comenzaron a desarrollar un amplio proceso participativo que derivó en la publicación de una Hoja de Ruta para un Chile Circular al 2040.
La visión es que para el año 2040, la economía circular regenerativa impulse a Chile hacia un desarrollo sostenible, justo y participativo que ponga el bienestar de las personas al centro. Esto, a través del cuidado de la naturaleza y sus seres vivos, la gestión responsable y eficiente de los recursos naturales, y una sociedad que usa, consume y produce de manera sostenible y consciente, fomentando la creación de empleos verdes y oportunidades para personas y organizaciones a lo largo del país.
En coherencia con esta iniciativa, desde la CChC junto el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025 de CORFO, surge la Estrategia de Economía Circular del Sector Construcción que busca generar un plan de acción hacia el 2025. Este plan convoca a los principales actores de la industria con el objetivo de impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, logren menor impacto ambiental, la regeneración del medio ambiente y la protección del patrimonio ambiental, fomentando y promoviendo la economía circular en el sector construcción.
¿Qué sigue?
La implementación de una economía circular en la construcción supone sacudir la forma de pensar y actuar del sector, instaurando todo un nuevo paradigma. Implica repensar cómo se concibe y construye la infraestructura, desbloquear o simplificar los obstáculos de financiamiento y del mercado, y revisar las normativas para que existan garantías que permitan su desarrollo. Esto involucra a las instituciones estatales y privadas, además del ámbito académico, para que conjuntamente formen e impulsen una estrategia sostenible en el rubro de la construcción en Chile. Solo de esa forma, iniciativas como la Hoja de Ruta pasarán del papel a la ejecución.
La misión de Everwood.
¿Sabías que Chile es el primer país de Latinoamérica en sumarse a la Red Global de Pacto por los Plásticos y el tercer país en el mundo, luego de Inglaterra y Francia? El objetivo de este pacto es repensar el futuro de los plásticos reuniendo a todos los actores de la cadena de valor: empresas, sector público y ONGs.
Nuestra filosofía está directamente ligada a esta misión. En Everwood creemos que sí es posible trabajar en pos de la reducción de la contaminación y la deforestación que, de forma alarmante, amenazan la Tierra. Reciclando plásticos provenientes de residuos de hogares y empresas productoras, fabricamos madera plástica para diversas aplicaciones. Sí, madera plástica. Se llama así porque se fabrica bajo los mismos formatos de la madera natural y se trabaja con las mismas herramientas de la carpintería tradicional, por lo que es una valiosa alternativa sostenible para el sector construcción. La madera plástica:
- No se astilla, no se pudre ni se oxida.
- No necesita mantenimiento.
- Es resistente al clima.
- Se conserva por más de un siglo.
- No es atacada por agentes químicos, roedores o termitas.
Queramos a nuestro planeta. La economía circular es el camino para reducir el impacto ambiental. Prefiere los productos ecológicos.